miércoles, 28 de noviembre de 2007

Llena de Magia

Bueno acá estoy otra vez; tengo harto que hacer y meterme a esta tonterita me descompone pero si esto no lo digo yo no lo dice nadie, vergonzosa sociedad en decadencia; no como cuando era cabro, ahi si que se decian las cosas, y con trago y cuete nomás para la inspiración, sin pastillitas raras como las del hijo de mi vecino Felisardo que el otro dia se zampó como 10, pobre esperpento ahora ya ni habla. En fin.

Dicen que la TV es mágica, y claro que lo es... porque a cada rato mágicamente te quieren hacer hueón. El otro día estaba echado rascandome la guata y viendo tele con mi pierna peluda al lado (dice que ya no necesita depilarse, y yo le digo que me sale urticaria cuando me roza con los perniles, pero le da lo mismo. Una rociada de laser le vendría bien a la vieja), y lo mejor que estaban dando era "La ley de la Selva", un supuesto didáctico y cultural programa familiar donde se transmiten valores mientras muestran animalitos y sus historias. Una sección era "la cámara oculta", donde en una compra-venta de autos el vendedor ("el" actor) ofrecía un espectacular auto deportivo a un precio miserable, con lo que atraia a los vistantes y los invitaba a subirse para probarlo. Al entrar al auto se deban cuenta que adentro había una Boa Constrictor (puta que sé) y el "bromeado" de turno gritaba, gesticulaba y arrancaba. Todo esto observado por el sempiterno Profesor Rossa, quien reía todo el tiempo.

Hasta acá todo normal, dirá usted, hasta novedoso el gag; pues no sea hueón y siga leyendo. La situación era tan falsa, pero tan repulsivamene falsa, que hubiese deseado tener a la Boa alrededor de mi doble pera para que me asfixiara (y a mi felpuda señora también, para no dejarla sola). Cada supuesto "bromeado" era claramente un aspirante a actor, que sobreactuaba desvergonzadamente cayendo rápidamente en la trampa, ofreciendo plata al contado por el auto, y rogando que lo dejaran probarlo. El animalejo era de tal tamaño que era imposible no verlo antes de entrar al auto, lo cual jamás sucedió con ninguno de los 14 compradores (sí, los conté, y qué). Las cámaras "escondidas" estaban claramente encima de las personas, que no las vieran era de taraditos. El Rossa reía a carcajadas en un primer plano, cual electrocutado vía enchufe, pero era la misma toma repetida durante todo el sketch. Cuando las personas salían del auto corrían detrás del vendedor ofreciendo combos y lanzando palabrotas, claro, como el chileno tiene una personalidad ultra fuerte y espontaneamente justiciera. Sóplenme este ojo!

Señores, en qué están pensando? acaso creen que uno no mira? acaso creen que uno nació ayer? acaso creen que uno es hueón?!

Córtenla!

Celedonio

lunes, 26 de noviembre de 2007

Como a Dolly

Buenas tardes. El otro día salió un aviso publicitario en un respetado (y momio) diario capitalino de una reconocida distribuidora de vehiculos pesados; en él se comunicaba la confianza que tienen sus clientes al ya ascender a 500.000, y una imagen en que se ven a muchas personas desde una toma áerea unidas y saludando con cara de felices estúpidos, agrupados de tal forma que creaban el efecto del logo de la empresa.

Como soy inteligente, busquilla y curioso, como me decía mi tía Salomona que me hacía unas cocadas de padre y señor mío, me puse a mirar a las personitas y reparé en un gordo canoso sonriente (escoba), y advinen: el mismo morbido salía 14 veces entre la gente, sólo que le cambiaban el color de la polera y el color del pellejo. Incrédulo, seguí mirando y claro, todos los individuos estaban clonados a lo dolly y chantados como escupos haciendo el efecto masa. Al final eran como 10 personas nomás, pero disfrazadas no se cuantas veces. No puede ser! acaso piensan que uno no se va a dar cuenta? acaso creen que uno no cacha? Acaso creen que uno es hueón?

Córtenla!

Celedonio